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	-Espejito, espejito, ¿kien es el rostro mas bonito? Luego de una discusión por afirmar ke ella no lo era akabó esparcido por el suelo. -manden matar a Blankanieves! Blankanieves korría escapando entre los densos arbustos hasta llegar a una especie de valle. En el medio había una kasa terriblemente tentadora...estaba hecha de karamelo. Extasiada por lo ke veian sus ojos incrédulos, se acerkó llena de kuriosidad a esas deliciosas paredes, y golpeó la puerta de galleta, tomando un pedacito ke saboreó mientras esperaba ke alguien le abriese. Nadie respondió, y su ansiedad no le permitió esperar mas. Forcejeó la puerta ke estaba trankada, luego de injerir la dulce cerradura (kuidando de no komer el pestillo) abrió lentamente la puerta para encontrar en una mesa tres tazas de sopa servidas y humeantes. Se acerkó a la taza grande, la kual estaba mui kaliente, la mediana, la kual ni se fijó, y le pekeña, la kual estaba a su gusto, pero komo no tenia hambre, se limitó a escupir un verde gargajo producto de su resfrío, y revolvió el tazón para disimular. Subió una escalera lentamente donde kuadros la seguían kon los ojos, y llegó a una habitación donde la dulce anciana kubierta en un espeso pelaje yacía. -dulce ancianita, ¿porké tienes los dientes tan grandes? -¿grandes? Respondió un tanto sorprendida, manoteó sus anteojos de la mesita de luz, y buskó algo en ke reflejarse, un tanto preocupada porke su dentista personal la hubiese estafado. Lo primero ke encontró fue una lámpara antigua, parecida a una tetera. No pudo reflejarse por la gruesa kapa de polvo ke tenia por arriba, así ke Blankanieves la tomó y la frotó para kitarlo y un espeso humo celeste salió de ella, apareciendo un genio komo salido de un cuento de hadas, ke prometió cumplir tres deseos. Un niño eufórico gritó suplicando -¡¡¡yo deseo ser un niño de verdad!!! Blankanieves asintió kon la cabeza viendo komo mágicamente se volvía de karne y hueso. Keriendo probar aun mas los poderes del genio, agregó: bueno... también kisiera...- hizo unos momentos de silencio para pensar algo realmente difícil y extravagante. -kisiera volar sobre un elefante. Las persianas de chocolate y grajeas se abrieron kon un fuerte viento, el mismo ke abrió las ventanas golpeándolas kontra las paredes de vainilla, y el pekeño Dumbo entró por la ventana. Blankanieves y Dumbo partieron juntos para perderse en el cielo, al infinito y mas allá. Ella, nunca comió la manzana, nunca pidió su tercer deseo y nunca la besó el príncipe para despertarla.